Leo en BoingBoing uno de esos ejemplos que les gusta poner a muchos para demostrar lo mala que puede llegar a ser la Propiedad Intelectual, un ejemplo de esos esperpénticos que demuestra, no los aspectos negativos de los derechos de autor, sino lo retorcidos que podemos llegar a ser los abogados.
El asunto es que SalonQuest, una marca de champú que parece ser una maravilla, ha requerido a una persona que vendía dos botes de su producto Aquage por eBay, para que desista de tal venta ya que había puesto a disposición del público una fotografía con la imagen de las dos botellas, las cuales considera que están protegidas por derechos de autor. í‰stas son las culpables de tal magno delito:
SalonQuest le requirió una vez a la pobre Jamie Olson, que había comprado los productos en una tienda de California, para que desistiera de su venta, pero al no hacerlo, le volvió a enviar una segunda carta para que dejase de vender los botes por eBay, bajo la amenaza de iniciar un procedimiento judical contra ella. Eso es saltarse a la torera la «First Sale Doctrine«, al menos por la prohibición para que revenda su producto en particular.
Tenéis 9 horas para pujar por los botes de champú de la discordia. Ahh, pero sólo envía a EE.UU. ¡Feliz puja!